miércoles, septiembre 20, 2006

Las mesadas no son un juego de niños

The Wall Street Journal

September 20, 2006 4:05 a.m.
Por Christina Binkley

A pesar de tantos consejos de expertos a favor de que los niños empiecen a aprender a administrar su dinero a partir de los tres o cuatro años, la mayoría de los pequeños no lo hace.

Apenas la mitad de los niños de cualquier edad recibe una mesada regular. La otra mitad debe trabajar por una propina utilizando su audacia, usualmente con chantajes sentimentales y pataletas. En una época en la que los padres vigilan a sus hijos más que nunca, muchos prefieren el control que les deja desembolsar dinero gasto por gasto.

Esto enloquece a David McCurrach, un autodenominado experto en mesadas y padre de cinco hijos, que preside una pequeña cooperativa en Tennessee. McCurrach aboga por otorgar una mesada apenas un niño tenga la capacidad de entender que el dinero compra cosas, dice, alrededor de los tres años. Luego, el padre debe añadir responsabilidad con la edad.

Una de las cosas más difíciles es determinar cuánto dar. Muchos expertos dicen que los padres raramente otorgan lo que deben. Sin embargo, pagar menos socava la lección sobre administración de dinero para el hijo, porque entonces los padres deben llenar los vacíos, pagando cosas que la asignación de una mesada debería cubrir.

Una regla común es que los niños deben obtener US$1 semanal por cada año de vida. O sea que los que tienen 7 años deben recibir US$7 por semana. Para los padres que deseen comparar ese monto con el que ellos recibían cuando niños, www.pediatrics.about.com (sólo en inglés) tiene una calculadora de mesadas que se ajusta al año en el que nacieron los padres, para que vean cuánto valía una propina actual en ese entonces. Escriba allowance calculator en la caja de búsquedas. Los resultados pueden sorprenderlo.

A los cinco años, los niños pueden empezar a ahorrar parte de su mesada, y para cuando tengan siete años, pueden empezar a comprar los regalos que les dan a sus amigos, dicen los expertos.

Como a eso de los nueve años, la mayoría está listo para recibir una asignación extra para ropa. Considere otorgar esta propina por separado y una o dos veces al año, digamos que para las temporadas de invierno y primavera. Un consejo de McCurrach: excluya a los zapatos de la mesada para ropa, para asegurarse de que los niños no compren zapatos baratos en una edad en que los pies están creciendo constantemente.

Existen opciones innumerables sobre la dinámica a usar a la hora de otorgar mesadas, cada una con un mensaje subyacente para los niños. Por ejemplo, ¿quiere dar el dinero a cambio de tareas o deberes escolares? Muchos asesores financieros no lo aconsejan. Su teoría dice que las tareas deben ser simplemente obligatorias.

Los padres que deseen una amplia perspectiva de varias posibilidades, y que además quieran enseñar una lección sobre contratos, pueden comprar un contrato de mesadas listo en www.kidscontracts.com (sólo en inglés), diseñado para identificar los usos permisivos del dinero, que incluye "incrementos" y hasta el otorgamiento de préstamos.

Al final, claro, los padres deben seguir sus propios instintos. Pero lo primero es establecer reglas y estar preparado para supervisar el gasto del niño.

"No tiene que dejarles comprar algo que crea inapropiado", dice McCurrach, cuyas propias teorías están reflejadas en un manual para padres titulado Allowance Magic (algo así como La magia de las mesadas).

Paso a paso

* Otorgue lo suficiente para crear responsabilidad.

* No relacione la mesada con deberes escolares o tareas domésticas.

* Sea claro y consistente con su decisión.

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